• Home
  • Categoría: Autoayuda

Qué hacer si te enamoras de una prostituta

El enamoramiento es una de las emociones más intensas que podemos experimentar. Han sido infinidad de autores, poetas, músicos, literatos y también filósofos los que han hablado de este sentimiento, tratando de explicarlo. Es complicado hacerlo de una manera general ya que cada cual siente el enamoramiento de una forma diferente, y evidentemente, sus circunstancias también son importantes para entenderlo. El contexto en el que nos enamoramos dependerá también de cómo hemos visto ese amor en los demás, desde nuestros padres a nuestros amigos. El cine, la televisión, la música o la literatura también nos han mostrado historias de amor increíbles, en ambos sentidos de la palabra. Maravillosas, llenas de magia y pasión, pero también demasiado perfectas como para darse en el mundo real. La expectativas amorosas suelen terminar chocando contra un muro de realidad que las destroza por completo, pero de esos pedazos puede acabar naciendo un amor auténtico. Enamorarse es algo hermoso, pero también puede ser tremendamente doloroso si no somos correspondidos.

Cada quien busca algo diferente en torno al amor en la otra persona, y a pesar de que suele salir mal, eso de esperar que una relación cumpla nuestros deseos es algo muy humano. Hay personas que, de hecho, entienden la vida solo a través del amor, de ese momento en el que todo parece increíblemente especial. Si no están enamoradas, si no andan con nadie, buscan desesperadamente una nueva relación, una chispa que encienda sus fantasías. Y eso puede llegar a ser muy peligroso, porque tampoco debemos enamorarnos de cualquiera. Para crear una relación realmente fuerte y duradera debe haber confianza, buena comunicación y mucha complicidad. El deseo sexual es otro componente básico, especialmente al principio, porque de lo contrario nos aburriremos rápidamente de esa relación. Buscamos una conexión a nivel sexual, pero también emocional e incluso social. Y nos acabamos fijando en personas que tal vez nos atraen mucho, peor por su situación, no son la pareja perfecta precisamente. Hay muchos hombres que se enamoran de prostitutas, al tener un vínculo que creen especial con ellas, y buscan una relación que no se base solo en el sexo.  

Leer Mas

Ecuanimidad y su importancia en el bienestar

Decía el gran filósofo español José Ortega y Gasset que “yo soy yo y mis circunstancias”, para apuntar a la necesidad de contextualizar nuestro pensamiento, nuestro comportamiento y nuestra propia forma de ser, aludiendo a nuestro entorno, a cómo hemos sido criados, a las vivencias que hemos tenido y seguimos teniendo, que nos van configurando como personas. Lo que nos ocurre, lo que pasa a nuestro alrededor, acaba afectándonos de una u otra forma. A veces de una manera más intensa y decisiva, otras, con una simple llamada de atención sobre un tema en concreto. La resilencia es un concepto de trata de explicar la capacidad por la que somos capaces de adaptarnos a los cambios y conseguir así que no nos afecten tanto cuando se producen. Y muy emparejada con ella, aunque con otro significado diferente, tenemos también la ecuanimidad, un estado mental al que muchos querrían llegar, pero que es tan fácil de conseguir.

Vivimos en un mundo que nos hace estar pensando constantemente en el futuro, con miedo en la mayoría de ocasiones, y también en el pasado, con resignación, por haber cometido errores o por no poder volver a ese momento en el que parecíamos más felices de lo que somos ahora. Añoranza y temor ante lo que vendrá son dos características comunes en nuestro día a día, que por supuesto, nos acaban afectando. Primero que nada, porque afectan a nuestra forma de vivir el presente. Casi nadie se da cuenta de que lo que está viviendo aquí y ahora es lo importante, porque ha sido el futuro que hemos planteado antes y será el pasado que recordemos en un tiempo. Crear un presente de estabilidad emocional es el mejor antídoto para conservar esa entereza frente a todo lo que venga por delante. Y esto se consigue a través de la ecuanimidad, un término que puede parecer utópico en un principio, pero que no está tan lejos como pensamos.

Leer Mas

Superar la pérdida de un ser querido

Vivimos totalmente despreocupados, pensando en el presente, haciendo lo que nos hace más felices en este momento y sin parar a pensar que todo cuanto tenemos es pasajero y algún día la muerte llama a nuestra puerta para llevarnos o para llevarse a uno de nuestros seres más queridos.

Cuando hay una larga enfermedad de por medio somos capaces de ir interiorizándolo poco a poco, de asumir la pérdida a corto plazo y logramos levantarnos mucho antes y poder seguir con nuestra vida. Sin embargo, cuando la muerte nos golpea al improviso y se lleva a una persona que lo era todo para nosotros, el mundo se nos viene encima y no sabemos qué hacer para salir adelante.

Durante los días posteriores lo más probable es que no tengas ganas de comer, no logres dormir bien, estés revuelto del estómago, sientas tensión, ansiedad, nervios y estés apático para hacer prácticamente cualquier cosa. No te preocupes por eso, tan solo te encuentras en el proceso natural del duelo.

Leer Mas