Todos hemos visto alguna vez una supuesta sesión de hipnosis, aunque sea por la televisión. Sabemos que este tipo de espectáculos están amañados en muchas ocasiones, ya que la persona que sufre esa hipnosis es un actor, o como poco, un compañero del propio mago o hipnotizador. Sin embargo, la hipnosis es un proceso real que se puede llevar a cabo por personas que conocen los secretos de este método, y son capaces de provocar un verdadero esto de mente en blanco en los demás. De hecho, la hipnosis se utilizó como parte del método psicoanalítico con el que Freud fundó la psicología moderna. Ha llovido mucho desde aquello y a estas alturas pocos se fían ya de los resultados de esas sesiones hipnóticas, pero en algunos momentos pueden ser una alternativa muy buena para conocer sucesos del pasado que la mente de una persona podría estar reprimiendo.
Según las propias teorías de Freud, hoy puestas en duda, nuestra mente cuenta con una zona donde se queda grabado todo lo que vivamos, especialmente cuando nos produce una emoción muy intensa. Por ejemplo, un trauma que hayamos sufrido desde pequeños, y que aunque no seamos conscientes de ello, nos afecta de mayores. Ese trauma sigue ahí, en nuestra mente, pero está en una zona a la que no tenemos acceso por nuestra propia consciencia, al menos de manera natural. Cuando el inconsciente toma el control, a través del sueño, o incluso a través de una sesión de hipnosis, se puede acceder a ese tipo de recuerdos, a esos traumas que seguramente explicarían mucho mejor lo que nos está ocurriendo en el presente. Pero, ¿es todo tan sencillo como hipnotizar a una persona y acceder a sus recuerdos mentales? ¿Es realmente eficaz esa hipnosis regresiva o puede llegar a ser peligrosa?
Qué es la hipnosis regresiva
Se conoce como hipnosis regresiva a la técnica llevada a cabo por un profesional cualificado a través de la cual es capaz de hipnotizar a una persona y hacerla volver atrás en el tiempo, mentalmente, para recordar ciertos sucesos que parece que su propio cerebro ha reprimido, pero que pueden ser la causa de base delos problemas que sufre en ese momento. La persona que regresa lo hace de forma controlada, sin sufrir daños, y según los expertos en esta técnica, es capaz de revivir esos sucesos como si estuvieran pasando en ese momento. Sin embargo, son muchas las dudas que este método pone sobre la mesa, desde el mismo momento en el que esos recuerdos pueden no ser tan reales como pensamos…
Así funciona la hipnosis regresiva
La hipnosis regresiva no deja de ser un tipo de hipnosis especial, en la que el hipnotizador toma el control mental del individuo al que está hipnotizando, para conseguir que vuelva atrás en el tiempo, mentalmente, y que en ese estado de hipnosis y calma, libre de cualquier prejuicio de su parte consciente, sea capaz de recordar de forma fehaciente cualquier hecho del pasado. El hipnotizador puede utilizar un metrónomo, un reloj o cualquier otro artilugio para conseguir que esa persona caiga en el estado hipnótico. Cada uno de nosotros tenemos nuestras particularidades, así que no será lo mismo para todos. Sin embargo, un hipnotizador profesional siempre encontrará la forma de meternos en ese estado. Cuando la mente de esa persona ya está bajo su control, el hipnotizador comienza a guiarla hacia el recuerdo que quiere encontrar. Para ello es necesario tener al menos una fecha remota del suceso en concreto, aunque sea una edad determinada. De lo contrario, las sesiones se pueden alargar muchísimo hasta encontrar ese punto que buscamos. Todo ello se puede realizar en la parte consciente, pero una vez hayan entrado en hipnosis, esas personas quedarán en manos del hipnotizador, que simplemente les guiará por sus recuerdos. Será la persona hipnotizada la que cuenta lo que está viendo, lo que está sintiendo, y en base a ello se fundamentará el relato.
¿Realmente sirve para recordar?
Esta es la principal duda a la que nos enfrentamos cuando hablamos de hipnosis regresiva. Y es que muchos defienden que este tipo de procesos no desvela auténticos recuerdos, sino memorias falsas que nos hemos inventado, o nos inventamos sobre la marcha, aun de manera inconsciente. Las cosas suceden de una forma determinada, pero nosotros las recordamos a través de nuestro propio filtro personal, y eso también debe ser tenido en cuenta a la hora de realizar estas sesiones. Puede que el suceso no ocurriese tal y como lo recordamos, pero que en nuestra mente sí lo hayamos vivido y revivido mil veces así. Esto hace que muchos desconfíen de esta terapia para solventar ciertos problemas traumáticos.
En qué casos se utiliza la hipnosis regresiva
La hipnosis regresiva es una técnica que suele utilizarse con aquellas personas que tienen recuerdos vagos o directamente, no tienen memoria de un hecho determinado que, sin embargo, les ha marcado de una manera importante, porque sus consecuencias sí que son más que evidentes y visibles. Suele ser muy común para pacientes psicológicos que tengan traumas reprimidos, normalmente de cuando son niños, y que no sean capaces de recordar exactamente qué es lo que produjo ese trauma. A través de este método, el hipnotizador llegará a la solución, al menos a su criterio, guiando a esa persona hasta el momento del suceso. El método, como decimos, es bastante cuestionado, ya que se ha utilizado en muchos casos importantes y sin embargo, no se ha llegado a conclusiones reales. Simplemente se ha visto que hay personas que tienen unos recuerdos distintos a otras que han vivido el mismo suceso. Eso ocurre de forma natural, no es nada premeditado ni pensado, es simplemente que cada uno de nosotros posee un juicio, una manera de entender cada situación, de vivirla y de afrontarla, y esa es la realidad que tenemos en nuestra. Por eso la hipnosis regresiva puede ser compleja y sobre todo provocar muchas dudas si es la única base que se tiene para un testimonio, por ejemplo.